El Mozart valenciano

fue durante algunos años el artista mimado
(Porcuna, España, nació 1652 y falleció en Lima, Perú, en 1698)
Llegó a América a temprana edad, tuvo una formación autodidacta, en la que deja sentir una fuerte influencia de Quevedo y de la poesía satírica barroca española. Parte de su producción se conserva en dos manuscritos fechados en 1689 y que tienen el título común Diente del Parnaso, que trata diversas materias contra médicos, de amores, a lo divino, pinturas y retratos, entre otros. Algunos de sus poemas son una sátira feroz contra los médicos y ponen de manifiesto la facilidad del poeta para la mordacidad y la burla, lo que le enfrentó a personalidades conocidas y relevantes del mundo colonial. Con humos negro, prodigó las imágenes conceptistas, las antítesis, los contrastes y las caricaturas del mundo vireinal, además de comentarios en versos sobre sucesos o circunstancias de la época y de autores que él consideraba malos o simplemente mediocres.